viernes, marzo 31, 2006

Gafas asimétricas


Como me moría de envidia porque Rosa (palito polo) dibujó a Aizún y a mí no, le he incitado así como el que no quiere la cosa a que me dibujara a mí también.
Con gafas asimétricas, cara de pan, lunares que parecen una mordedura de vampiro y pelo a lo Cruella de Vil, pero me ha dibujado.
Gracias Rous:*

lunes, marzo 06, 2006

Llueve en rincones diferentes

Tú, en un rincón del mundo, y llueve, y llevas paraguas sin querer llevarlo porque te agobia, así que coges y a la primera de cambio lo tiras en la papelera, y sigues, miras hacia el cielo ajustándote el cuello de una gabardina, no sé por qué llevas una gabardina, si tu nunca llevas de eso, y es de color beige y se ven, al fondo, las rayas de tu camisa. Caen las gotas por tus rizos, y después por el cuello vertical de la gabardina, y llueve, y miras al cielo, y sigues andando por la calle, pensando en que en ese rincón siempre llueve pero que lo has aprendido a llevar. Se acercan dos negros y la acera es muy estrecha para pasar los tres, y tú sin pensarlo desciendes hacia la carretera y te da por pensar en planteamientos de territorio que hasta entonces no habían ocupado tu mente, de etnias, de no sé que historias, y después te paras, y piensas en mí, en yo…

…Yo, en otro rincón del mundo que no es el mismo que el tuyo, por esas cosas que pasan de no coincidir ni en tiempo ni en espacio, o si en tiempo pero no en espacio, ya sabes, esos planteamientos de tercero de la ESO que se repiten a lo largo de nuestro juego de vida hasta aburrir. Pero yo estoy en este rincón, y llueve, y odio que llueva porque me estropea el pelo y he cogido un paraguas endeble cuyos hierros se retuercen, y me agobia llevar paraguas y los chubasqueros me parecen horteras, así que lo tiro en la primera papelera que pillo, que no tendrá la misma forma ni el mismo color que la tuya porque estamos en espacios distintos: la mía es gris oscuro, cilíndrica, llena de agujeritos, igual la tuya es verde y tiene capucha, o es una bolsa amarilla sin fondo. Y como he mandado a la mierda al paraguas asqueroso no me queda otro remedio que ir sorteando los huecos de los balcones, y lo tomo como un juego infantil: ¿A qué no me mojas el pelo? Chincha rabincha, yo corro más que tú, lluvia, yo caigo más que tú, y más lejos, y hoy, no me pillas.

Pero la lluvia nos cae, y jugando a ser cronopios rebeldes, nos da igual. Todo se solucionaría con un bonito final donde uno es el paraguas (con un dibujo cielo azul en el interior) del otro, donde nos convertimos en el chubasquero estiloso del otro, donde, los dos, nos mojamos bajo la lluvia. Pero no…

…Pero cada uno en nuestro rincón del mundo escucha de fondo la banda sonora de In the mood for love, Jumeji’s Theme, y nos entran ganas de llorar, porque llueve y estamos solos. Y no lloramos porque nos sentimos estúpidos haciéndolo, débiles, indefensos, criajos de dientes de leche, pero con las gotas de lluvia, nadie se daría cuenta, ¿lo entiendes? Nadie se daría cuenta.